El rey JuanCarlos lo llamó “Cazafamas”
Bien dice la gente que ?la verdad tarda, pero llega?. El mundialmente famoso magistrado español Baltazar Garzón Real, que ocupó las primeras planas de los periódicos y de los noticiarios de televisión cuando trató en vano de extraditar de Gran Bretaña a España al ex dictador chileno general Augusto Pinochet y, por insistente solicitud de la Premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú Tum, también ha tratado en vano de extraditar al general retirado Efraín Ríos Montt, máximo dirigente del partido político Frente Republicano Guatemalteco (FRG), acusándole de haber asesinado a varios ciudadanos españoles y cometido el delito de genocidio durante el tiempo que fue dictador en Guatemala.
El investigador y periodista español José Díaz Herrera ha publicado recientemente el libro Garzón: Juez o parte (de la Editorial Esfera de los Libros). Un relato biográfico y profesional de uno de los jueces más mediáticos de España que está crispando el ánimo de más de uno.
En este libro menciona a una maleta con el sumario de los GAL entregada en el palacio de la Moncloa, en una esquina. En la otra, agentes del CESID pinchando su teléfono porque el Gobierno, con el que había concurrido a las elecciones, no se fiaba de el. Y en el medio una “variopinta” carrera del magistrado que ?ha asumido el papel de campeón de los Derechos Humanos?.
Para poder saber quién es y qué ha hecho este personaje, puede consultarse en la clave de Internet http://es.wikipedia.org/wiki/Baltasar_Garz%C3%B3n
En la sección De Wikipedia, La enciclopedia libre, encontré la siguiente información:
Baltazar Garzón Real nació el 26 de octubre de 1955 en Torres, Jaén (España). Es un conocido magistrado, juez titular del Juzgado Central de Instrucción número 5. Estos juzgados investigan los delitos cuyo enjuiciamiento corresponde al Juzgado Central de lo Penal o a la Audiencia Nacional, tribunales españoles que enjuician en primera instancia delitos de mayor relevancia.
Antes de terminar sus estudios de abogacía, Garzón desempeñó distintos trabajos de albañil y camarero. Además de que ayudó a su padre como despachador en una gasolinera.
En 1979 se licenció en Derecho, aprobando sus oposiciones para Juez dos años más tarde, en 1981, teniendo como primer destino el pueblo de Valverde del Camino (Huelva). Posteriormente, fue trasladado al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Villacarrillo (Jaén). En 1983 ascendió a magistrado, siendo destinado al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 3 de Almería. En 1987 se le nombró Inspector Delegado para Andalucía por el Consejo General del Poder Judicial, y en 1988 tomó posesión como magistrado del Juzgado de Instrucción nº 5 de la Audiencia Nacional.
Casos más relevantes
Garzón cobró fama internacional por promover una orden de arresto contra el ex dictador chileno Augusto Pinochet por la muerte y tortura de ciudadanos españoles durante su mandato, y por crímenes contra la Humanidad, básandose en el informe de la Comisión chilena de la verdad (1990-1991) y en el caso “Caravana de la Muerte” instruído en Chile por el juez Juan Guzmán Tapia. Garzón ha manifestado reiteradamente su deseo de investigar también al ex secretario de Estado estadounidense Henry Kissinger en relación con la instauración de las dictaduras de la década de 1970 en América Latina en lo que se llamó “Operación Cóndor”.
Asimismo, Garzón abrió la posibilidad de que se levantaran en España cargos de genocidio contra funcionarios argentinos por la desaparición de ciudadanos españoles durante la dictadura argentina de 1976-1983. En ese marco, el 19 de abril de 2005, la Audiencia Nacional logró la extradición de México del represor Adolfo Scilingo, a quien condenó a 640 años de prisión.
En abril de 2001, solicitó al Consejo de Europa desaforar al entonces primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, miembro de la asamblea parlamentaria del Consejo.
En diciembre de 2001 puso en marcha una investigación de las cuentas en el extranjero del segundo banco más grande de España, BBVA, por supuestos delitos de lavado de dinero. En enero de 2003, el magistrado criticó acremente al gobierno de Estados Unidos por la detención de sospechosos de al Qaida en la bahía de Guantánamo, Cuba. También hizo una campaña intensa contra la guerra de Irak de 2003.
También ordenó el arresto de Osama bin Laden, máximo jefe de la red terrorista musulmana fundamentalista Al-Qaida
Casos en España
Investigó a Jesús Gil, antiguo alcalde de Marbella y dueño del Club Atlético de Madrid, por corrupción.
Asimismo, ha dirigido importantes operaciones contra el tráfico de drogas, especialmente en Galicia. Sus investigaciones contra el terrorismo contribuyeron también a denunciar las acciones de José Barrionuevo Peña, Ministro de Interior del PSOE, con relación a los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL), la llamada “guerra sucia” contra el terrorismo. Éste fue uno de los factores que llevó a la derrota del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en las elecciones de 1996.
Garzón ha investigado también a la organización terrorista Euskadi Ta Askatasuna (ETA) y lo que considera su entorno: En 1998 ordenó el registro de varias sedes de la Coordinadora de Alfabetización y Euskaldunización de Adultos (AEK) y el arresto de su tesorero.
En julio de ese año ordenó el cese de actividades de Orain SA, empresa vasca de comunicación que gestionaba el diario Egin y su estación radiofónica de este último, Egin Irratia. Acabada la instrucción de Garzón, el cierre fue levantado por la Audiencia Nacional, pero Orain SA quedó en bancarrota. Posteriormente ordenó el cese de actividades de Zabaltzen y el cierre de Egunkaria, el único diario que se editaba íntegramente en lengua vasca.
Estos hechos han sido duramente criticados por los movimientos de defensa del euskera, que consideran que el cierre de periódicos atenta más contra la cultura vasca que contra el terrorismo de ETA.
En octubre de 2002, suspendió durante tres años las operaciones del partido Batasuna, considerando que formaba parte del entramado de ETA.
Así mismo, ha investigado a otras organizaciones del llamado Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV), como Xaki, Ekin, Jarrai, Haika y Segi, y a sociedades y organizaciones cuya vinculación con el MLNV no está clara, como el coro musical Euskaria, alegando que forman parte de diversos frentes del entramado de ETA.
Críticas
Los críticos de Garzón señalan que el magistrado parece ansioso de llamar la atención pública. Esto, afirman, le puede haber llevado a investigaciones apresuradas terminando en veredictos de exoneración. Sus críticos utilizan frecuentemente el término “juez estrella” para describirle.
Carrera política
En 1993, tras varios contactos con miembros relevantes del PSOE como José Bono y Felipe González (quien fue presentado a Garzón por el primero), Garzón tomó la decisión de abrir un paréntesis en su carrera en la judicatura y adentrarse en la política con la alegada intención de poner fin a la corrupción que parecía haberse instalado bajo el manto del gobierno socialista. Su deseo de verse libre de ataduras de partido y de verse solamente dependiente de quien él consideraba por entonces principal valedor de ese deseo de regeneración democrática (Felipe González), para algunos, o su ambición, para sus detractores, le llevaron a solicitar su inclusión en las listas electorales como número dos por Madrid, justo detrás del Presidente González, a pesar de que siendo natural de Jaén, lo lógico habría sido presentarse como número uno por esa provincia.
Tras la victoria electoral de 1993, fue declarado jefe de un fortalecido Plan Nacional contra las Drogas. No obstante, y a pesar de llegar a ser número dos de Interior, y según sus defensores, la constatación de la poca predisposición de la cúpula socialista a tomar medidas enérgicas contra la corrupción lo llevó a su abandono de la política poco después de que Belloch se hiciera con las riendas de la fusión de los ministerios de Justicia e Interior.
Según sus críticos, como Federico Jiménez Losantos, su incursión en la vida política fue motivada más bien por un inconfesado deseo de convertirse en ministro cuya posterior frustración provocó su pronta salida del PSOE.
Obras
En el año 2002 publica su primer libro Cuento de Navidad: es posible un mundo diferente de Ediciones de la Tierra. Es una obra que reúne el pensamiento de Baltazar Garzón Real en Derechos Humanos, la Justicia Universal y la Corte Penal Internacional, el Terrorismo, los Fundamentalismos Religiosos, la Inmigración, y los Derechos de los Pueblos Indígenas. En el escribió: ?…los olvidos impuestos no duran, y, el fantasma del pasado, para el responsable, vuelve en forma recurrente y demuestra la falsedad del planteamiento, porque aquellos que olvidan la trascendencia de unos hechos, más en su miseria que en su grandeza, están condenados a repetirlos…?
En febrero de 2005 publica su segundo libro, Un mundo sin miedo (Plaza & Janes, S.A. y Debolsillo), en el que cuenta a modo de reflexión o bien como cartas dirigidas a sus tres hijos: Aurora, Baltasar y María. Los puntos más destacables y polémicos de sus diecisiete años como juez de lucha contra el terrorismo, el crimen organizado y la impunidad. Expresa también su opinión acerca de temas de actualidad y revela datos (tanto de relevancia nacional como internacional) poco conocidos hasta ahora. Es emotiva su mención a las experiencias vividas junto a su compañera, la fiscal de la Audiencia Nacional Carmen Tagle. El libro ha desatado polémica y ha recibido denuncias, sobre todo por parte de la derecha española, e incluso César Vidal, (locutor de la cadena radiofónica COPE), le ha pedido a Garzón formalmente desde su programa La Linterna, que cuelgue la toga.
En junio de 2005 se publica el libro ¿Y si mi hijo se droga? Claves prácticas para prevenir, saber y actuar de Begoña del Pueyo, Alejandro Perales (Editorial Grijalbo) con introducción de Luis del Olmo y prólogo de Baltazar Garzón.
El 24 de febrero de 2006 presenta su tercer libro, La lucha contra el terrorismo y sus límites de Adhara Publicaciones, S.L., acto organizado por el Club Siglo XXI, en el que coincidieron el presidente del PP, Mariano Rajoy, la europarlamentaria del PSOE, Rosa Díez y el periodista Luis del Olmo. La entrevista que hizo Garzón al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para ser incluida en esta obra, tuvo lugar en julio de 2004 y, durante la misma, el jefe del Ejecutivo recordó que en su discurso de investidura prometió que su objetivo prioritario sería la lucha “sin cuartel” contra el terrorismo con los recursos de una sociedad democrática. Por su parte, Mariano Rajoy señalo que la labor de Garzón había sido, junto con la de otros jueces, decisiva en la lucha contra el terrorismo.
Aparte de estos libros hay otra obra destacable acerca de Garzón, cuya autora es la conocida periodista Pilar Urbano, su título es: Garzón: El hombre que veía amanecer. Biografía autorizada, motivo de escándalo pues en ella presuntamente se desvelan secretos sumariales. Sus enemigos lo tacharon de hagiografía, pero permite saber algo más acerca de la vida e ideología del juez. Para tener un testimonio de primera mano sobre su forma de actuar resulta muy útil leer las memorias de José Amedo donde se hace un retrato muy vivido del personaje y de las circunstancias que rodearon la segunda instrucción del caso GAL.
También hay diversas obras muy críticas contra él, como Garzón, la otra cara, de Pepe Rei, antiguo redactor jefe de Egin y de la revista Ardi Beltza, que fue procesado por el propio Garzón por su relación con ETA, en la que se le acusa de torturas a los presos etarras. Pepe Rei se encuentra actualmente en libertad y libre de todo cargo.
En diciembre de 2001, Garzón puso en marcha una investigación de las cuentas en el extranjero del segundo banco más grande de España, BBVA, por supuestos delitos de lavado de dinero. En enero de 2003, el magistrado criticó acremente al gobierno de Estados Unidos por la detención de sospechosos de al Qaida en la bahía de Guantánamo, Cuba. También hizo una campaña intensa contra la guerra de Irak de 2003. Ordenó también el arresto de Osama bin Laden, jefe de la red terrorista Al-Qaida
Díaz Herrera subraya en su libro sobre el Juez Baltasar Garzón que El magistrado de la Audiencia Nacional es un bluff ?que solamente persigue aquellos asuntos que le dan fama, dejando muchos sumarios abiertos y otros a medias, de donde podría inferirse que no persigue la verdadera Justicia?.
Y agrega: ?No se le conoce ni una sóla sentencia tras veinticinco años de carrera y que, además, dedica buena parte de su tiempo a impartir por el mundo conferencias y clases magistrales pagadas a precio de oro.
?Según ha podido saber Periodista Digital, este es un libro que desde el inicio ha tenido algunos problemas para promocionarse en otros medios de comunicación. La dureza con la que es tratada la figura de uno de los jueces con más influencia de nuestro país podría encerrar la clave de cierto temor, por parte de algunos medios, de publicar reseñas o artículos al respecto.
?El propio juez Garzón ha insinuado, de manera implìcita, sentirse incómodo con la publicación en tono crítico y negativo de datos sobre su carrera profesional?.
La persecución de los Gal
En las páginas de su libro Garzón: Juez o parte, Díaz Herrera explica cómo el magistrado se mueve por intereses políticos según el color del partido en el Gobierno. Así, narra cómo en 1993, poco antes de ser ?fichado? por Felipe González como número dos del PSOE, se reunió con uno de los condenados por los GAL, Michel Domínguez, quién le informó de algunos detalles del secuestro de Segundo Marey.
Garzón no solo no le tomó declaración sino que hizo algo más grave: se presentó con el sumario en una maleta en La Moncloa e informó personalmente a Felipe González de sus entresijos. Pero con el PP hizo algo similar. Porque cuando Aznar llegó a Moncloa en 1996
se convirtió en el látigo de ETA, hizo suyos centenares de informes policiales y metió en la cárcel a la trama política de la organización terrorista. En algún caso, como el del diario Egin, atribuyéndose un sumario que había iniciado años antes su compañero Carlos Bueren en el Juzgado de Instrucción 1.
Claro que toda esta política judicial, según el autor, coincide con su pretendida candidatura al premio Nobel de la Paz. De este episodio se deduce el ánimo vengativo del magistrado subrayado por el autor en ?Garzón: Juez o parte?.
Pero como Aznar se negó a apoyarle en una entrevista radiofónica, inició su guerra particular en su contra aprovechando su decisión personal de apoyar la invasión de Irak y le amenazó en reiteradas ocasiones con que acabaría ante el Tribunal Penal Internacional por meter a España en una guerra supuestamente ilegal.
Atentado contra el rey Juan Carlos I
El verano que la organización terrorista ETA quiso atentar contra Juan Carlos I, Garzón participó en la desarticulación del comando que quería llevarlo a cabo. Pero mientras las fuerzas de seguridad francesas transmitían al minuto a la policía española que pudo asaltar el velero en alta mar desde Paris las informaciones del viaje de los terroristas por mar hasta Palma de Mallorca, como se hace habitualmente con los narcotraficantes.
Pero Díaz Herrera cuenta cómo se esperó a que desembarcaran y se instalaran en un piso de la calle Rafaletas, desde donde tuvieron a tiro al yate Fortuna varias veces. Y sobre este episodio comenta:
?La indignación del Rey al ser informado de la forma en que se llevó a cabo la investigación fue tal que le llamó ?Cazafamas?.
No obstante, para los izquierdistas trasnochados de Guatemala y, sobre todo, los rencorosos porque perdieron la guerra de guerrillas, el juez Garzón es un héroe internacional, una especie de “caza fantasmas” porque persigue a quienes gobernaron en el pasado y se enfrentaron a las diferentes subversiones comunistas.